viernes, 18 de enero de 2008

Una propuesta política de la LRS a los sindicatos del ICE


Desde la Liga de la Revolución Socialista (LRS), preocupados por la situación política actual[1] y en vista del avance de la burguesía en el parlamento con las leyes de la Agenda de Implementación[2]; hemos decidido hacer al conjunto de los sindicatos del ICE, la siguiente propuesta política. No es la oportunidad en este momento de detenernos exhaustivamente en el análisis de la coyuntura –lo que ya hemos venido haciendo desde octubre en otros documentos-, sino el momento de remarcar los principales elementos que caracterizan la situación política actual, y ofrecer un verdadero plan de combate para poner en movimiento al conjunto de los trabajadores y el pueblo pobre de Costa Rica contra la Agenda de Implementación, el gobierno y el conjunto de la burguesía proimperialista nacional.
El llamado es para los sindicatos del ICE debido en gran parte a su importancia estratégica, y por ser este sector el más amenazado en lo inmediato por las leyes de destrucción de la institución que están a punto de ser aprobadas en la Asamblea Legislativa, lo que a todos nos tiene preocupados e interesados en llevar adelante la mejor política que sirva para la lucha.
Creemos que para derrotar la Agenda de Implementación, al gobierno y al conjunto del empresariado, es necesario que luchemos todos juntos en conjunto con los sindicatos del ICE de acuerdo a las siguientes tareas:

1) Luchemos contra las alzas energéticas que impondrán las dirigencias administrativas
[3] contra el conjunto de los trabajadores costarricenses en los próximos meses, correspondientes a un 6% por parte de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) y a un 32%[4] en las tarifas directas del ICE en los próximos meses. Si los sindicatos del ICE quieren ser tomados en serio cuando afirman luchar por los intereses del pueblo pobre de Costa Rica, lo primero que deben hacer es colocarse en primera línea de batalla (con paros masivos y huelga) contra las alzas en los servicios energéticos y de telecomunicaciones; apoyando de igual forma cualquier lucha contra las alzas en los demás servicios básicos, como los combustibles, el transporte, el agua, o los alimentos. Esta actitud de luchar por las demandas más sentidas del pueblo, les merecerá una enorme confianza y un enorme apoyo de masas a los sindicatos y trabajadores del ICE; que abriría las posibilidades de lograr una recuperación en la capacidad de movilización obrera y popular contra la Agenda de Implementación y el gobierno; más allá del golpe sufrido por el movimiento de masas el 7 de octubre en el Referéndum, y más allá del raquítico paro convocado por las direcciones de algunos sindicatos del ICE el 26 de noviembre de 2007. . A las direcciones de los sindicatos del ICE les corresponde comenzar a decidir: ¡O lucha contra las alzas energéticas del lado del conjunto de trabajadores costarricenses, o lucha contra el conjunto de los trabajadores de Costa Rica del lado de las alzas energéticas!

2) Luchemos por un ICE bajo control directo de sus propios obreros y el conjunto de usuarios. Esta medida es elemental para evitar la destrucción del ICE, y para arrebatarle a la jerarquía administrativa la posibilidad de volcar al conjunto de trabajadores costarricenses contra los obreros del ICE. Es urgente expulsar del ICE a las corruptas jerarquías administrativas, que hacen orgías con los recursos del conjunto de los trabajadores y el pueblo, por medio de alzas desmedidas y el pillaje de recursos; y no hay mejor manera de lograrlo que mediante la acción conjunta de trabajadores internos y externos al ICE. Por otra parte, el mejor argumento utilizado por el empresariado para colocar en perspectiva de choque al conjunto de trabajadores costarricenses contra el ICE, lo constituye el hecho de la “lentitud” y “mala calidad” en los servicios de telecomunicaciones. Dejando de lado el hecho de la falsedad de este argumento, lo que sí es cierto, es que los trabajadores de Costa Rica deben participar directamente en las tareas de producción, distribución, y equipamiento tecnológico en todo lo referente a energía y telecomunicaciones; por supuesto si queremos que en los hechos esta empresa sea de todo el pueblo costarricense. Así mismo todos los trabajadores de Costa Rica deben participar en el disfrute directo mediante su propia administración, de las infinitas riquezas generadas por el ICE; y no sólo una pequeña capa de trabajadores costarricenses. La decisión para las direcciones sindicales del ICE es muy sencilla: ¡o un ICE controlado y “modernizado” directamente por Carlos Slim, Felipe Rodríguez las manos del capital imperialista; o un ICE controlado y mejorado directamente por sus propios trabajadores y usuarios en Costa Rica!

3) Sumemos a los trabajadores de las Unidades Estratégicas de Negocios (UEN) y las Sociedades Anónimas Laborales del ICE (SALES) a luchar por ser contratados directamente por el ICE, en propiedad y con todas las garantías económicas y políticas. Esta política definitivamente ensanchará la fuerza de los trabajadores del ICE, al incorporar nuevos contingentes de trabajadores, contratados con todos los derechos políticos y económicos a la sindicalización, a los buenos salarios, y a la estabilidad laboral en la planilla directa de la institución. Además de esto, la capacidad de lucha de los trabajadores de la institución crecerá notablemente, al nutrirse de cientos y miles de trabajadores subcontratados o precarizados mediante la modalidad de servicios contratados en los proyectos hidroeléctricos, en los campos de la limpieza, el mantenimiento, la seguridad, etc. Una política como esta, además de fortalecer a los trabajadores ya instaurados en el ICE, servirá para que los trabajadores contratados por privado tomen como suya la lucha directa por la defensa del ICE; ya que serán incorporados directamente a la repartición directa de los beneficios de la lucha. Otra vez a las direcciones sindicales les toca decidir: ¡O unidad de acción con los trabajadores precarizados, o unidad de acción conciliadora con las autoridades administrativas corruptas!

4) Luchemos por mejores salarios para los trabajadores de los proyectos hidroeléctricos y subcontratados, en el sentido de incorporar a la lucha directa contra la jerarquía administrativa interna del ICE, el gobierno, y el empresariado; a los trabajadores subcontratados bajo la modalidad del “contrato por horas” y en general, a los contratados mediante el régimen outsourcing. Es necesario entender que esta no es una lucha de dirigentes sindicales por su estilo de vida, o de afiliados y no afiliados a los sindicatos, que no es una lucha de únicamente los trabajadores contratados directamente por el ICE; sino de todos, y no hay mejor forma de entenderlo que articulando todas las demandas en el sentido de sumar todas las fuerzas posibles contra la jerarquía administrativa y el gobierno de los Arias, que representa los más grandes intereses empresariales. Esta política significará que los trabajadores sentirán indisolublemente la lucha como suya, y hará surgir nuevamente la necesidad de la movilización; más allá del débil paro del 26 de noviembre y el golpe del Referendo. Nuevos ejes de lucha levantarán la moral y la disposición a la movilización por parte de miles de trabajadores energéticos. ¡O aumentos millonarios para Pedro Pablo Quirós[5] y las fejaturas del ICE, o aumentos para los trabajadores de proyectos, precarizados y subcontratados!


5) Apoyemos cualquier lucha por el aumento de salarios comenzada por los trabajadores del magisterio, acueductos, municipalidades o cualquier otro sector. Esto le dará una gran autoridad a los sindicatos del ICE y a sus trabajadores, al apoyar de manera unificada y solidaria cualquier lucha que pueda desarrollarse. De esta manera, si los trabajadores del ICE ayudan a otros contingentes de asalariados, estos apoyarán igualmente su lucha y mutuamente todos nos fortaleceremos. Pero el apoyo quiere decir huelga, quiere decir toma de edificios, quiere decir paros; no únicamente dulces palabras de apoyo pronunciadas por los dirigentes sindicales. Esta huelga y estos paros encontrarán rápidamente el apoyo de otros sectores, como el de los estudiantes universitarios, de secundaria; y el de otros contingentes obreros de la empresa pública. ¡Arriba la unidad de acción amplia y democrática con los docentes y demás trabajadores! ¡No a la complicidad tácita con la ofensiva del gobierno!

6) Entendamos de una vez por todas que el terreno para la derrota de las Leyes de destrucción del ICE es el de las calles, y el momento se reduce a unas cuantas semanas, no depositando ninguna ilusión ni confianza en la estrategia de desgaste del Partido Acción Ciudadana (PAC) y el FA en el Parlamento ni en sus miles de mociones. Lo anterior por que ante cualquier atraso, la burguesía (sin importar las ilusiones de quienes no esperaban una derrota el 7/10/2007) puede solicitar al imperialismo una prórroga, que “benévolamente” la cederá. El momento para librar la lucha por derrotar la Agenda de Implementación se reduce a unas cuantas semanas, y para librarla con éxito se impone sumar todas las fuerzas posibles de acuerdo a todas las demandas como hemos dicho. Si no libramos la lucha en el corto plazo (unas semanas), un sector que encierra un enorme potencial estratégico de combate como es el de los trabajadores energéticos sufrirá un fuertísimo golpe, y todo el movimiento de masas perderá para su lucha una importante posición conquistada a través de la historia. Hoy los trabajadores del ICE, la CNFL y otros; pueden arrodillar al empresariado si deciden juntos suspender el fluido eléctrico, si deciden suspender la telefonía fija, el Internet y las telecomunicaciones. Si las Leyes de Implementación se aprueban, esta capacidad de combate se verá reducida violentamente al mínimo; y costará muchos sacrificios, años y sangre volver a conquistarla. Por otra parte, los mismos que metieron ilusiones en el Referéndum y llamaron el 30 de septiembre a “la marcha final de la victoria”; hoy tratan de meter nuevas ilusiones en lo que pueda suceder con las elecciones en Estados Unidos, depositando cualquier ilusión en milagros desde arriba en vez de buscar una salida explosiva de fuerza desde abajo. Ni la posible llegada de los Demócratas a la Presidencia en Estados Unidos, ni las elecciones de 2010 en Costa Rica, son garantía para la derrota de las leyes de implementación y para anular el TLC como ingenuamente creen algunos. ¡Luchemos ya para defender al ICE! ¡Ninguna confianza en los Demócratas, en el PAC, en el FA, o en nuevos Referéndums criminales!¡Las leyes de destrucción del ICE se derrotan en la calle con movilización!

7) Impulsemos una política de lucha sin cuartel contra la Ley Antiterrorista y la ofensiva represiva del gobierno y el empresariado, tomando en cuenta que desde la derrota electoral del 7 de octubre la derecha viene levantando violentamente la cabeza. El gobierno y el empresariado nacional preparan con la excusa del “combate a la delincuencia”, un cóctel de leyes (posiblemente en una sola)
[6] para fortalecer el aparato represivo estatal (MSP, OIJ y otros), entre las que va diluida la Ley Antiterrorista; de una importancia política capital para combatir al movimiento de masas y la lucha de los trabajadores y el pueblo pobre con nuevas herramientas legales[7] en momentos donde se avecina una aguda crisis económica, y nuevos ataques del empresariado contra el pueblo (nuevos impuestos mediante el Plan Fiscal, Leyes de Implementación, privatización y destrucción de empresas públicas, recorte del presupuesto social, etc). ¡O nos volcamos contra la ofensiva represiva del gobierno y la Ley Antiterrorista, o esperemos a que los mismos cuerpos represivos suspendan nuestras reuniones, saqueen y violen nuestros locales, eliminen nuestro derecho a la huelga, a la expresión, a la movilización y a la protesta!

8) Construyamos un gran Comité de Huelga Nacional en una gran Asamblea Obrera y Popular, en donde estén representados dirigentes obreros y populares de todo el país y de todos los sectores; incluidas las organizaciones políticas obreras que lucharon contra el TLC. Todo lo anterior en la perspectiva de constituir una poderosa herramienta nacional de unidad de acción, que impulse la movilización masiva, la autodefensa, y en general la lucha contra el gobierno. Los sindicatos del ICE, en conjunto con los grandes sindicatos del magisterio (ANDE, APSE, SEC)
[8]; deben tomar como propia la tarea de construcción de un Gran Comité de Huelga Nacional, que aliente la construcción de comités de huelga de apoyo a la lucha por salarios, contra las alzas en los servicios, contra la Ley Antiterrorista y la Agenda de Implementación; a lo largo y ancho de todo el país. Los sindicatos del ICE deben tomar la iniciativa en la construcción de verdaderos comités obreros y populares unificados, que comiencen por ser integrados por cuando menos, la mitad de los afiliados de los principales sindicatos (ICE y Magisterio); y que seguidamente incorporen a sus filas, a los comités patrióticos y a las organizaciones políticas. A los sindicatos del ICE les corresponde el honor de llamar a la batalla a todos los luchadores y sus organizaciones de lucha: Comités Patrióticos, organizaciones políticas obreras y de izquierda, sindicales, estudiantiles, campesinas. Llevando a la práctica cabalmente este plan de lucha, la victoria está más que asegurada.
¡O construimos un poderoso comité de huelga nacional, apoyado por comités barriales, provinciales y por lugar de trabajo para impulsar la movilización de masas y derrotar al gobierno; o continuamos con la fragmentación política y el divisionismo entre organizaciones sindicales, políticas y de distinto tipo!


Liga de la Revolución Socialista (LRS)

Suscribe:
Gabriela Arroyo Wong (Trabajadora del Instituto Costarricense de Electricidad)


[1] Una situación a todas luces signada por el retroceso operado en el movimiento de masas desde la derrota electoral del 7 de octubre en el Referéndum.
[2] La burguesía ha logrado ya la aprobación de la Ley de Representante de Casas Extranjeras, y ha aprobado en primer debate la Ley de Protección a las Obtenciones Vegetales (UPOV) el lunes 14 de enero; siendo esta última Ley una de las más polémicas. Según la fracción oficialista burguesa, ahora siguen los proyectos de la Ley General de Telecomunicaciones y la de Fortalecimiento del ICE; las dos posiblemente más problemáticas para el empresariado.
[3] Dirigencias administrativas del Grupo ICE entre las que se encuentran la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL), el mismo Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).
[4] Diario Extra. Sábado 12 de enero de 2008. P, 2.
[5] Diario Extra. Viernes 14 de diciembre de 2007. http://www.diarioextra.com/2007/diciembre/14/nacionales07.php
[6] El gobierno está temeroso de no poder aprobar por ejemplo la Ley Antiterrorista, por lo que en el Consejo de Gobierno del Miércoles 16 de enero ha propuesto a su bancada liberacionista en el parlamento, plantear todas las leyes mediante una sola iniciativa de Ley, propuesta desde la Comisión de Seguridad de la Asamblea Legislativa.
[7] Según esta Ley serán penados como delitos las siguientes actividades: “Rebelión: Serán reprimidos con prisión de uno a cuatro años los que se alzaren en número de 10 o más para impedir la ejecución de leyes o de las resoluciones de los funcionarios públicos. Conspiración: Será reprimido con prisión de uno a cinco años el que tomare parte de una conspiración para cometer el delito de rebelión. Seducción de fuerzas de seguridad: El que sedujere fuerzas de seguridad o usurpare el mando de ellas para cometer una rebelión o un motín será reprimido con la mitad de la pena del delito que trataba de perpetrar. " (La Nación. 22/10/2007. http://www.nacion.com/ln_ee/2007/octubre/22/sucesos1284452.html ) Es decir, si nos reunimos para marchar, o si sencillamente nos juntamos para planear una movilización o un mitín para luchar contra alguna Ley (ejemplo el TLC o la Agenda de Implementación); ya seremos condenados como terroristas, ya sea bajo los cargos de rebelión, conspiración, o seducción. La fecha límite para la aprobación de dicha Ley es hasta mayo de 2008, y se dirige a paralizar la capacidad de combate del movimiento de masas en un momento de relativo retroceso político después del 7 de octubre pasado.
[8] Siglas: ANDE, Asociación Nacional de Educadores; APSE, Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza; SEC, Sindicato de la Educación Costarricense; SIICE, Sindicato de Ingenieros del ICE; ANTTEC, Asociación Nacional de Trabajadores y Técnicos de la Energía y las Comunicaciones; Asociación Sindical de Trabajadores del ICE; SIPROICE, Sindicato de Profesionales del ICE; SINDEU, Sindicato de Empleados Universitarios.