viernes, 7 de septiembre de 2012

Se realizó el III Congreso de la LER-QI: En medio del giro a la derecha de Dilma y el PT


Editorial Internacional: las posiciones políticas de la FT-CI y los grupos hermanos del PTS

Retomamos esta sección de “Editorial Internacional”, que inauguramos hace algunos números de LVO y que está dedicada a seguir el desarrollo de las organizaciones de la Fracción Trotskista-Cuarta Internacional (FT-CI), en los diversos países de Latinoamérica y Europa. Queremos contribuir a que los lectores puedan conocer más profundamente nuestras organizaciones hermanas, su intervención en la lucha de clases, sus programas, las luchas políticas y de estrategia con las distintas corrientes que actúan en la izquierda (el centrismo trotskista, el autonomismo o el anarquismo). También dar a conocer los debates ideológicos y la producción teórica marxista. En este número destacamos los desafíos que se propusieron los compañeros de la LER-QI de Brasil, en su III Congreso y continuamos cubriendo los actos y homenajes a León Trotsky, como el realizado por la LTS de México.
Entrevistamos a Marcelo Torres y Diana Assunção, dirigente del Sindicato de Trabajadores de la USP, ambos dirigentes de la LER-QI.

¿Como se desarrolló el congreso?

Marcelo: El congreso sesionó los días 19, 20 y 21 de agosto con la presencia de casi 200 compañeros entre delegados y militantes, además de los invitados internacionales.

Diana: Nuestro III Congreso ocurrió en una situación nacional de cambios en la coyuntura, en medio de un giro a la derecha del gobierno Dilma, no solamente expresando más ataques a la clase trabajadora –con descuentos de días de huelga y represión– y una reaccionaria reforma laboral sino también presentando proyectos de privatización en rutas y ferrocarril ahora, y en una segunda etapa los puertos, aeropuertos y usinas eléctricas. Un verdadero giro histórico del PT. Al mismo tiempo, la clase trabajadora pasa a destacarse como un factor clave de la situación, cuando los primeros elementos de la crisis capitalista internacional comienzan a expresarse nacionalmente, como no se veía hace algunos años. Una situación con elementos transitorios donde es necesario que los revolucionarios estemos alertas para superar la presión del conformismo y pasividad típica de la situación anterior donde primaba la estabilidad lulista que, con pocos cimbronazos, se mantuvo durante 7 años.

¿Qué debates se dieron?

Marcelo: Estos cambios se están produciendo ahora por eso fue muy importante el informe nacional del camarada Daniel Matos donde buscamos analizar los cambios en la realidad brasilera. Los militantes, con más de 25 intervenciones debatieron los escenarios e hipótesis que están planteadas sobre los ritmos de la crisis internacional y las perspectivas de recomposición del movimiento obrero en Brasil, que pasará necesariamente por un enfrentamiento con la burocracia sindical oficialista, aunque esta intenta distanciarse de las medidas reaccionarias del gobierno Dilma.

¿Qué discutieron sobre la construcción de la LER-QI para el próximo período?

Diana: Como política nacional vamos a proponer levantar una gran campaña contra los ataques del gobierno y de los patrones y para que los capitalistas paguen por la crisis. Consideramos necesario que en especial las organizaciones de izquierda lleven adelante una campaña concreta no solamente de unificación de las luchas en curso sino para enfrentar las privatizaciones, la reforma laboral y jubilatoria y la represión a los luchadores y luchadoras. Vamos a proponer a partir del Sintusp que se organice un Encuentro para debatir estas propuestas y levantar un programa obrero frente a la crisis capitalista de Brasil.

Además, discutimos una orientación que combina un fuerte trabajo ideológico, con intervención en la lucha de clases, presentando frente a la vanguardia las ideas y programa del trotskismo como respuesta a la actual situación política. Al mismo tiempo, seguiremos debatiendo con todas las corrientes las diferentes estrategias que ya comienzan a expresarse, como es la política del centrismo trotskista en relación a Siria y las elecciones en Grecia.

En un país con tradición del trotskismo, expresada hoy en varios partidos y organizaciones ¿por qué construir la LER-QI?

Marcelo: En primer lugar y, en cierta forma, nos favorece estar en un país donde el trotskismo tiene tradición desde los años ´30 y es reconocido nacionalmente como la extrema izquierda. En el Congreso reafirmamos que nuestra estrategia de construcción no es evolutiva que, frente a procesos más agudos de la lucha de clases, se darán rupturas y fusiones en el movimiento obrero y estudiantil y en la propia izquierda y nos preparamos para confluir con los sectores radicalizados que vendrán de ese proceso. La necesidad de construir la LER-QI está ligada a que no hay una organización genuinamente revolucionaria, ya que ni el PSOL ni tampoco el PSTU, que se reclama trotskista, lo son. Esas organizaciones vienen de años de adaptación a lo que nosotros llamamos el “modo petista de militar” (una militancia dentro de los marcos institucionales) son sindicalistas y electoralistas al extremo. Para el PSTU la revolución y el socialismo, son promesas, cuestiones para el discurso, pero no hacen parte de su práctica política ni de una concepción revolucionaria de construcción de un partido leninista.

Diana: Si consideramos por ejemplo, el caso del PSTU, que es la corriente más numerosa que se reivindica trotskista, en el terreno de la lucha de clases solo ha mostrado su impotencia. En San José de los Campos, una ciudad obrera importante donde ellos tienen un trabajo histórico y dirigen el sindicato de los metalúrgicos, después de los 4.000 despidos en Embraer (fábrica de aviones) que fue una derrota sin lucha -que son las peores derrotas porque lleva a la desmoralización- ahora están sufriendo nuevos ataques en General Motors. Pero no logran dar ninguna respuesta contundente, solo presionan esperando gestos del gobierno o del Ministerio de Trabajo o negociaciones favorables con la patronal, sin preparar ninguna lucha seria incluso involucrando a la población en la defensa de los puestos de trabajo. En el último período ya fueron despedidos unos 1.500 trabajadores de forma fragmentada y ahora están queriendo despedir unos 2.000 más. El sindicato (dirigido por el PSTU) festejó como una victoria que consiguió un respiro por unos meses, pero está claro que eso no significa que no van a pasar nuevos despidos. Pero hay más, en las elecciones en la ciudad de Belén, el PSTU está haciendo una alianza con un partido que es parte del gobierno nacional, de tradición stalinista, el PcdoB. Abandonan la lucha intransigente por la independencia política de la clase obrera para conseguir un concejal. Lo peor es que intentan hacer aparecer esa política oportunista y sin límites de clase, como si fuese un “gobierno de trabajadores”.

En este sentido construir la LER-QI hoy es parte de la tarea de hacer viva las ideas del trotskismo, no solamente en la propaganda y la teoría revolucionaria y en su elaboración, sino mostrar una práctica política a tono con las herramientas del marxismo revolucionario y las tácticas que los trabajadores deben llevar adelante en medio de la crisis. Superando la practica del centrismo del PSTU y el reformismo de izquierda del PSOL para construir una verdadera alternativa revolucionaria.

¿En este escenario, cuáles son sus fortalezas o puntos de apoyo?

Marcelo: Hace años que somos parte de la dirección del Sintusp, el sindicato de los no docentes, junto a compañeros independientes. No es un dato menor. La USP es la principal universidad del país y una de las importantes de America Latina, lo que nos permite que nuestra intervención en la lucha de clases o en los debates teóricos adquieran proyección nacional. El Sintusp es quizá el sindicato que mas ha luchado en todos estos años de estabilidad lulista. Y no ha sido solo por reivindicaciones propias sino que hemos sido vanguardia en defensa de los trabajadores tercerizados, incluso que están afiliados a otros gremios, y también asumimos los reclamos populares. Junto con esto, estamos desarrollando una importante corriente estudiantil. Desde el sindicato nos unimos con los estudiantes y, junto a destacados intelectuales y profesores que simpatizan con el sindicato combativo y nuestra corriente, enfrentamos los ataques del rector, del gobierno del PSDB y los planes de privatización de la enseñanza. Este rol de vanguardia dentro del sindicalismo de izquierda en Brasil es un orgullo para nosotros. Hemos sufrido persecución a causa de eso. Nuestro compañero Brandão fue despedido por luchar en defensa de los trabajadores tercerizados y Diana y Pablito, también de la LER-QI, están procesados junto a decenas de dirigentes sindicales, trabajadores y estudiantes. Pero vamos a seguir en la lucha contra esta represión y por un sindicalismo clasista y revolucionario en Brasil. Esta pelea la desarrollamos también, participando desde el sindicato y desde nuestro trabajo en el movimiento obrero y estudiantil, en Conlutas y de Anel, organizaciones sindical y estudiantil alternativas a las oficialistas CUT y UNE, que dirige mayoritariamente el PSTU.

Diana: También, en el Congreso, discutimos que teníamos que ampliar la influencia partiendo de este importante punto de apoyo conquistado fortaleciendo el trabajo en el movimiento obrero, principalmente en la región alrededor de la USP, donde vamos a abrir una nueva Casa de Cultura y Política para que se organicen los trabajadores y la juventud, donde hay importantes concentraciones industriales y el Sintusp es una referencia. Vamos a priorizar la relación con los sectores más explotados de nuestra clase, como son los trabajadores precarizados, las mujeres trabajadoras y la juventud obrera. Nuestra intervención hace años en este Sindicato, expresa el acierto de una política en defensa de la unidad de las filas obreras, donde centenas y miles de trabajadores precarizados de la región que viven particularmente en la favela San Remo, al lado de la universidad, conocen y se referencian en el Sintusp.

Marcelo: Además votamos reforzar nuestro trabajo en el Subte de San Pablo. Estamos en el ABC (zona industrial de la periferia de San Pablo) y en importantes ciudades del interior paulista como Campinas, Marilia y Franca y también en Río de Janeiro y Belo Horizonte. Nosotros impulsamos también actividades de formación, como el curso del Manifiesto Comunista para trabajadores que desarrollamos durante todo el primer semestre por nuestro camarada Claudionor Brandão, que fue una gran experiencia en este sentido. Vamos a realizar un ciclo de debates llamado “Porque Trotsky” para las universidades y lugares de trabajo donde estamos. Ese ciclo estará compuesto también del lanzamiento de la Revista Estrategia Internacional-Brasil y de un acto en homenaje a León Trotsky.

Carta de un veterano

La LER QI tiene solo 12 años de existencia. La mayoría de sus dirigentes hoy tiene menos de 30 años. Sin embargo estos jóvenes revolucionarios se han fusionado con militantes de tradición y fundadores de la LER-QI como Val Lisboa, uno de los máximos dirigentes de esta organización, que fue fundador del PT en 1980 y del PSTU en 1994. También fundador de la LER-QI Claudionor Brandão es una de las figuras emblemáticas de la vanguardia sindical de Brasil, un dirigente histórico del Sintusp. Además de los compañeros fundadores, esta joven organización viene de fusionarse con compañeros como Gilson Dantas, médico que estuvo preso durante la dictadura de 1964. También en los años de intervención en las luchas del Sintusp, la LER-QI logró confluir con una de las principales dirigentes obreras de las luchas de las trabajadoras tercerizadas, la compañera Silvana, una mujer negra y nordestina que, a partir de una lucha por mejores condiciones de trabajo despertó a la vida política.

Reproducimos parte de la emotiva carta que Gilson envió al Congreso:

“Mi ausencia y el alejamiento, encima de todo por la enfermedad que intento superar paso a paso es menor de lo que ustedes imaginan. Todas las cosas tienen su tiempo, su dinámica y, de todo punto de vista, lo más importante es que ustedes sientan que contribuiré con las fuerzas que estén a mi alcance para que tengamos éxito en la militancia. Estoy convencido de que la pasión va aflorar por todos los poros de nuestro Congreso, en cada resolución, en cada propuesta de los equipos de base. Y por último hago una consideración. En mi lejana juventud cronológica, cuando ingresé en una organización trotskista, naturalmente pensé que estaba construyendo la IV internacional. No lo estaba. Desgraciadamente para mí, no lo estaba. Hoy se que sí estamos, se qué nos proponemos y estamos partiendo de la más alta y acertada perspectiva para la reconstrucción de la IV internacional y del internacionalismo proletario.”